Gnocchi con nabo rojo sobre crema de guisantes, altramuces y jengibre

Deja reposar los altramuces -o almejas- unos veinte minutos en agua fría con sal, luego escúrrelos y enjuágalos.
De esta forma, se deslizará cualquier impureza o arena. En una cacerola pequeña, sofríe la chalota cortada en rodajas en un poco de aceite. Cuando esté blanda, añade los guisantes. Deja que cojan sabor y luego cúbrelos con agua salada.
Lleva a ebullición y, en cuanto los guisantes estén tiernos, añade el estragón y apaga el fuego. Con una batidora de inmersión, reduce los guisantes a una crema. Si es necesario, pasa la crema por un colador, debe quedar sedosa. En este punto, rectifica de sal y pimienta, luego añade el aceite y emulsiona la crema, casi batiéndola ligeramente. Resérvala mientras se mantiene caliente.

Calienta una sartén grande -o un wok-, úntala con un chorrito de aceite y añade los dientes de ajo, limpios y sin el núcleo central, y la guindilla partida en trozos grandes. Echa los altramuces, sube el fuego, ralla el jengibre y tapa.

Cuando los altramuces se hayan abierto, lo que sólo debería llevar unos instantes, retira la tapa, desglasa con el vino y vierte los ñoquis directamente en la sartén. LosGnocchi con nabo rojo se cocinarán en unos instantes directamente en el jugo de cocción de los altramuces y absorberán todos sus aromas. Fríe los ñoquis, reparte la crema de guisantes en los platos, cubre con los ñoquis y los altramuces calientes, añade unas gotas de aceite crudo y decora con perejil. Sírvelo bien caliente.

Gracias a barbara.torresan.chezbabs